El contexto empresarial posee una dinámica en la cual prevalecen diferentes tipos de desafíos que las organizaciones deben saber cómo afrontar. Estos factores disruptivos no desaparecen por completo, por eso saber aprovecharlos puede ser una estrategia ganadora. Las oportunidades y amenazas suelen coexistir, aquí te indicaremos su relación.
Una manera eficaz de convertir amenazas en oportunidades
Evaluar las oportunidades y amenazas para que estas últimas funcionen a tu favor no es una labor sencilla, ya que puede requerir de una evaluación operativa exhaustiva. Dada su complejidad, muchas empresas modernas acuden a consultores o asesores para hallar respuestas sobre qué procedimientos o políticas están mal encaminadas.
De igual forma, esta examinación interna le corresponde al personal con experiencia, capacitación y conocimientos sobre el análisis DAFO. Para poder convertir una amenaza en una oportunidad, resulta esencial comenzar por identificar los factores que están afectando tu negocio de forma directa o indirecta.
Mediante una lista de los retos reales planteados, debes resolver los siguientes dilemas:
¿En qué forma incide sobre mi rentabilidad?
Cuando hablamos de una amenaza directa, entendemos que ésta tiene la capacidad de incidir sobre la base de clientes, el volumen de ventas y la percepción de nuestra reputación. A menudo, esta clase de desafío proviene de la competencia y la falta de innovación para contrarrestarla.
¿Cómo influye sobre la estabilidad de mi negocio?
Si se trata de una amenaza indirecta, debes evaluar qué vulnerabilidades o fallas podrían estar ocurriendo al interior de la empresa. Hay factores como las regulaciones, la situación política o la fluctuación de los mercados que difícilmente podrás controlar. No obstante, debes adaptarte a estas condiciones para mantener la estabilidad del negocio.
¿De qué manera afecta mi estructura organizacional?
Es factible que existan condiciones externas a la organización que determinen su estabilidad interna. Esta amenaza ocurre cuando el éxito de la compañía depende en su mayor parte de la estrategia de ventas y la adquisición de clientes. Si dependes únicamente de los consumidores, necesitas revaluar tu modelo de negocios.
En nuestra experiencia, convertir amenazas en oportunidades depende en gran medida de priorizar aquellos factores que no puedes controlar. Una vez diagnosticados, estableces las medidas de ajuste para que dejen de ser un riesgo financiero. Esto implica ofrecer innovaciones en atención al cliente, comercio electrónico, personalización y otros aspectos donde superes a la competencia.
Recurre a un consultor de negocios
Otra forma efectiva de lidiar con oportunidades y amenazas es contratando los servicios de un consultor externo. Con la ayuda de un profesional capacitado o certificado que entienda los problemas frecuentes de tus operaciones, conseguirás un mayor entendimiento de cómo mejorar. Además, podrás aprovechar sus conocimientos para estrategias duraderas y la actualización de tu modelo de negocios.
Toda empresa tiene la necesidad de solventar las oportunidades y amenazas para avanzar de forma sostenida y sin mayores contratiempos. Si estás teniendo problemas en este departamento, contáctanos, en ActionCOACH tenemos las herramientas que buscas. Nuestro equipo de profesionales ampliamente experimentados te dará los conocimientos para superar cualquier desafío.